Burqin es un municipio palestino situado al suroeste de Yenín, en Cisjordania. Su Club de Mujeres es conocido en la zona, ya que se ha convertido en un centro económico y social vital para la comunidad, brindando oportunidades para que las mujeres participen en la producción agrícola y en la generación de ingresos.
Este Club fue fundado en 2005 por un grupo de 15 mujeres que iniciaron su actividad en una pequeña habitación alquilada. Así, comenzaron a producir y comercializar sus propios alimentos, al mismo tiempo que se apoyaban unas a otras para desarrollar sus habilidades profesionales.
En 2008, el Club se trasladó a un espacio más grande y adecuado, lo que les permitió expandir sus actividades y servicios. Desde entonces, este Club no ha dejado de crecer y sumar logros decisivos para estas mujeres y, consecuentemente, para la economía local de Burqin. Sin embargo, el contexto actual, marcado por el conflicto en la región, ha obligado a estas mujeres a mudarse otra vez y ceder este espacio a la Dirección de Salud local. Ahora, continúan con su actividad con determinación, pero lo hacen desde un lugar más pequeño y menos apropiado.
El impulso del convenio
Este Club de Mujeres ha experimentado un impulso decisivo al participar en el convenio que desarrollamos en esta región, desde 2023, en colaboración con nuestros socios locales Agricultural Development Association (PARC) y Rural Women’s Development Society (RWDS), y con la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
Como consecuencia, las mujeres que forman parte de este Club han podido ampliar sus operaciones y mejorar sus medios de vida. Con el objetivo de impulsar la agricultura sostenible y apoyar el empleo femenino, ellas están aprovechando esta oportunidad para fortalecer sus actividades económicas y reducir sus costes operativos.
Una de las contribuciones más determinantes que se han llevado a cabo en el marco del convenio ha sido la instalación de paneles solares en el Club. Además, este ha sido equipado con modernas máquinas de procesamiento de alimentos (hornos, molinos…) que ahora funcionan gracias a la energía que producen estos paneles, con el consecuente ahorro y el enfoque sostenible que ello supone. De esta forma, estas mujeres no solo están consiguiendo aumentar su capacidad de producción, sino que también están explorando nuevas oportunidades comerciales relacionadas con la preparación y el envasado de tomillo y encurtidos para la venta, por ejemplo.
Por otra parte, gracias a esta iniciativa, estas mujeres también han recibido plantones de diversas hortalizas, como berenjenas, pepinos y pimientos, a través de los cuales pueden sembrar y cuidar sus propios cultivos para producir encurtidos y otros alimentos destinados a la venta local. Este impulso está siendo determinante para que estas mujeres participen directamente en la producción agrícola, siendo más autosuficientes y capaces de gestionar sus propios negocios.
Gestión de comedores escolares
El Club de Mujeres Burqin ha ido diversificando sus fuentes de ingresos a lo largo de los años, ofreciendo múltiples oportunidades para que sus miembros generen ingresos. Una de las iniciativas más exitosas del Club es la gestión de los comedores escolares.
Las mujeres preparan comida, incluidos pasteles, aperitivos y bebidas, que venden en seis comedores escolares. Estos alimentos son caseros, horneados por ellas mismas o adquiridos de proveedores locales. El negocio de comedores escolares proporciona a las mujeres una fuente de ingresos fiable y constante, al tiempo que les permite relacionarse con la comunidad local.
Un modelo de éxito
El Club de Mujeres de Burqin es un claro ejemplo de cómo el apoyo específico de una iniciativa, como nuestro convenio en este caso, puede empoderar a las mujeres y promover el crecimiento económico sostenible en las comunidades rurales. Al centrarse en la energía renovable, la producción agrícola y la igualdad de género, la iniciativa ha permitido a las mujeres de Burqin expandir sus negocios, reducir sus costes operativos y tener un mayor control sobre su futuro económico.
A pesar de los desafíos que enfrentan, incluido el acceso limitado a los recursos y el desplazamiento, las mujeres de Burqin siguen prosperando. Con el apoyo y la inversión constantes en su cooperativa, tienen el potencial no solo de mejorar sus propias vidas, sino también de contribuir a los objetivos más amplios del desarrollo sostenible en Palestina. El éxito del Club de Mujeres de Burqin demuestra el poder transformador de las iniciativas de base y la importancia de empoderar a las mujeres a través de oportunidades económicas y de crecimiento profesional.