La asociación marroquí-saharaui “ASOCIACIÓN DE DISCAPACITADOS DE DAKHLA”, con la que colabora la Iglesia Católica, trabaja desde el año 2000 para dar respuesta a las necesidades de atención terapéutica a niños que sufren algún tipo de discapacidad o minusvalía, ayudándoles de esta forma a su integración social.
En el Centro trabajó un equipo de enfermeros y sanitarios, todos ellos voluntarios, que se ocuparon de la atención de la población infantil de hasta 12 años de edad, sin discriminación alguna por razón de etnia, credo religioso, etc.
Durante todo el año, se atendió a 60 niños con diversas discapacidades: físicas, auditivas, intelectuales, etc. La mayoría de los niños que acudieron al Centro para recibir rehabilitación tenían entre 2 y 4 años, y estaban afectados por alguna discapacidad motriz e intelectual. Generalmente, pertenecían a familias con muy pocos recursos económicos, que no alcanzan a pagar los 10 dirhams (1 euro) que les costaría ir y venir al Centro en taxi. Por ello, el equipo sanitario trabajó también directamente con sus madres para que aprendieran a realizar la rehabilitación de sus hijos en su propia casa, garantizando así una mayor continuidad en el tratamiento.
La ayuda recibida del Pontificio Consejo Cor Unum se destinó a la compra de sillas de ruedas de distintos modelos: en su mayoría pequeñas o medianas, pero también grandes para los adolescentes que las necesitasen, y el material necesario para la fabricación de escayola.