La intervención tiene como objetivo empoderar a las mujeres para que se vuelvan autónomas y resilientes frente a crisis como la COVID-19, dotándolas de recursos para salir de la situación de vulnerabilidad y pobreza, así como para combatir posibles situaciones de violencia.
Para ello, se reforzarán las habilidades y capacidades para la empleabilidad de mujeres jóvenes tanto jordanas como refugiadas sirias, con nulos o escasos ingresos familiares y con limitadas oportunidades de prosperar.
Asimismo, se trabajará con el sector privado y cámaras de comercio para obtener un producto que vincule la empleabilidad, el trabajo decente y un entorno laboral seguro y libre de violencia para las mujeres. Además, a través de los centros de empleabilidad, se establecerán acuerdos con empleadores que requieran de personal laboral.
Por último, con un enfoque de trabajo conjunto con instituciones locales con un alcance nacional, se realizarán mesas de trabajo en las que plantear soluciones y recomendaciones para llevar a la negociación de la nueva Estrategia Nacional de Protección Social-NSPS. Con acceso directo a instituciones como la JNCW, se enriquecerá la discusión de dichas mesas redondas hacia la reforma de las regulaciones dirigidas a que las mujeres construyan un estatus de resiliencia. Tendrá también un enfoque internacional a través del diseño de webinars, que integrarán a otras entidades locales de la región mediterránea y las mujeres, como una oportunidad para la creación de redes y la promoción de la expansión de este tipo de iniciativas, sus aprendizajes y oportunidades de impacto.