Con este proyecto se buscaba dar respuesta a algunos de los problemas de pobreza y desnutrición, especialmente en las mujeres y en los niños de las áreas rurales, introduciendo una mejora concreta en los sistemas de producción y crianza de cuyes, así como un uso más racional en la alimentación familiar.
Para ello se ha construido y puesto en marcha un criadero modelo de cuyes, y 100 criaderos unifamiliares para 100 campesinos, 80 de los cuales son mujeres. Además, se ha impartido un Programa de capacitación y asistencia técnica a los productores y se crea un Servicio de asesoramiento para lograr una mejor comercialización de esta producción.
Este proyecto, cuyos objetivos responden al Programa nacional para mejorar la situación nutricional de las comunidades del Altiplano, ha contribuido a reforzar la Estrategia del gobierno boliviano para la reducción de la pobreza.