Todo comenzó cuando Isabel Ruiz, profesora del instituto, contactó con la fundación para organizar una sesión de sensibilización sobre la situación de los refugiados sirios en el Instituto Las Veredillas de Torrejón de Ardoz , a alumnos de secundaria, que tuvo lugar el pasado 21 de abril.
Como resultado, mostrando un gran nivel de compromiso y participación, y aprovechando la proximidad de la celebración de la Fiesta del Instituto, se decidió organizar un mercadillo solidario para recaudar ayuda para los proyectos de ayuda humanitaria de la Fundación Promoción Social en el campo de refugiados de Za’atari en el norte de Jordania.
Fue impresionante cómo se involucró toda la comunidad educativa, desde algunas madres del AMPA, los profesores a los propios alumnos. Nos lo cuenta así Isabel:
«El día de la fiesta del Instituto nuestro departamento llevó a cabo un mercadillo solidario con el fin de destinar lo recaudado al campo de refugiados sirios de Za’atari (Jordania). Para ello organizamos una venta de objetos no fungibles de todo tipo (adornos, decoración, manualidades, papelería, bisutería, CDs, DVDs, etc.) que los propios alumnos y profesores trajeron para poner a la venta. Semanas antes tuvimos en el IES una charla de sensibilización a cargo de Promoción Social y después una movilización de todo el instituto a base de carteles realizados por los mismos alumnos para animar a todos a colaborar.
Desde el primer momento contamos con el apoyo del director y del departamento de actividades extraescolares, pero sobre todo con el entusiasmo y la ayuda valiosísima de las madres del AMPA. Ellas fueron las que se ofrecieron a ir por las clases para ‘sensibilizar’ a profesores y alumnos explicándoles bien la actividad y animando a todos a participar activamente.
La víspera de la fiesta un grupo de voluntarios de 3ºESO estuvo decorando y colocando los pupitres que servirían como puestos del mercado. Otro grupo madrugó para poner los precios y distribuir los objetos por las mesas. Estaba previsto que las ventas duraran solo una hora pero -dado el éxito- se prolongaron durante toda la mañana.
Hubo profesores y alumnos que además quisieron dar dinero como donativo. A dos alumnas árabes se les ocurrió montar un puesto de tatuajes de henna para poder contribuir con el dinero que cobraban por cada tatuaje. Algunos chicos y chicas de 1º ESO dedicaron tiempo del fin de semana a hacer pulseras y colgantes que también se vendieron muy bien.
Al final de la mañana tuvimos que desmontar -no sin cierta pena por lo bien que lo pasamos- nuestro mercadillo. Como nos ayudó mucha gente pudimos recoger todo en poco tiempo. Enseguida contamos lo que habíamos recaudado. Nos hizo mucha ilusión ver lo bien que nos había ido, sobre todo teniendo en cuenta que lo habíamos organizado con muy poco tiempo y sin ninguna experiencia. Nos han ido llegando fotos de la fiesta y muchos comentarios positivos. Todo el mundo coincide en que los primeros beneficiados hemos sido nosotros porque hemos aprendido a pensar en los demás y a valorar mucho más todo lo que tenemos».