Dicho acto, que tuvo lugar el 11 de marzo de 2019, coincide con la presentación, por parte del Observatorio Mujer e Igualdad (MEI) de Promoción Social, del estudio “¿Existe ‘penalización’ por maternidad?” que analiza cómo las mujeres españolas se enfrentan a una doble discriminación, por el hecho de ser mujer y también por el hecho de ser madre, en la 63ª Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (2019) de Naciones Unidas (CSW63).
La Mesa Redonda: «¿Existe ‘penalización’ por maternidad?» en el Instituto Cervantes de Nueva York, se trata de un evento paralelo a la mencionada Comisión de Naciones Unidas.
La presentación corrió a cargo de su Director, Ignacio Olmos, y de María Beamonte, Directora General de Fundación Promoción Social, quien se refirió a la actividad de Fundación Promoción Social desde hace más de 30 años en más de 100 proyectos en Oriente Medio, Asia, África y Latinoamérica con el objetivo de empoderar social y económicamente a la mujer y fomentar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
Puntualizó que “ese compromiso es el que ha llevado a la Fundación a la creación del Observatorio “Mujer e Igualdad” (MEI), que tiene la ambición de convertirse en una red multidisciplinar de expertos en el análisis de la situación de la mujer en el mundo”.
A continuación tomó la palabra Antonio Jesús Sánchez Fuentes, Director del Grupo de Investigación “Políticas de Familia” de la Universidad Complutense de Madrid y co-autor del Estudio realizado por UCM, la Universidad de Sevilla y Acción Familiar.
Explicó que aún falta mucho por estudiar y por conocer y que hay que concienciar a los organismos nacionales e internacionales para que se mejoren los datos estadísticos que nos permitan medir la realidad y el impacto de las políticas públicas.
Declaró que “No sabemos qué parte de la brecha salarial hay que corregir, qué parte de la brecha hay que respetar porque responde a una decisión personal y qué parte de esa decisión es una decisión libre o empujada por la presión social” y puntualizó que el impacto marginal de la brecha salarial en las mujeres desaparece cuando desaparece la edad fértil, mientras la paternidad en los hombres, en el impacto agregado, y a partir de los 33 años, no solo no tiene un impacto sino que tiene un bonus por paternidad.
Subrayó que la mayor penalización por maternidad se concentra en el grupo de mujeres con un nivel de ingresos intermedios, en la clase media y cerró su intervención con la conclusión de que “las mujeres sufren una doble penalización, por ser mujeres y por ser madres, y eso es injusto y además tiene un impacto social muy importante”.
A continuación intervino Eva Chamizo Llatas, Directora de Asuntos Europeos de Iberdrola, quien centró su intervención en la necesidad para las empresas de adoptar medidas de conciliación para toda la plantilla, mujeres y hombres, porque ello genera productividad y la mejora de la motivación y sentido de pertenencia de las personas.
Comentó que “hoy en día hay un 42,8% de mujeres en nuestro Consejo de Administración, la Vicepresidenta del Consejo es una mujer, dos de las cuatro comisiones consultivas del Consejo están presididas por mujeres” pero mostró su rechazo a que este número obedeciese a cuotas en lugar de a la valía de esas mujeres.
Puntualizó que en Iberdrola, la medida de conciliación que más impacto ha tenido ha sido establecer la jornada continua obligatoria para casi todos los empleados. Se ha conseguido eliminar la estigmatización que supone para las personas, mujeres y hombres, que quieran conciliar vida personal y profesional y se ha disminuido el 80% de las solicitudes de reducción de jornada.
Las medidas de conciliación, subraya, tienen que ser para hombres y mujeres para que de verdad generen un impacto.
Ana Fernández Ardavin, Decana del IMF Business School, manifestó que “los matrimonios forzosos, las maternidades tempranas y el cuidado de las familias comprometen la incorporación de las niñas en el mercado laboral en los países en vías de desarrollo”.
Según sus palabras, 25 millones de niñas nunca tendrán la oportunidad de acceder a la educación primaria en los países en vías de desarrollo, mientras que en los países occidentales, las mujeres son mayoritarias en todos los niveles formativos excepto, entre los 35 y 45 años.
Seguidamente Blanca Narváez, Directora General de la Fundación Junior Achievement, indicó que las habilidades cognitivas están en la base de las decisiones que toman las personas a lo largo de su vida. Reivindicó que la educación es un instrumento poderosísimo de cara a eliminar estereotipos y reducir tanto en chicas como en chicos la percepción de ideas como “cuidar de los hijos es menos sacrificado para las mujeres que para los hombres” o “a los chicos se les da mejor las matemáticas que a las chicas”.
Moderó la mesa, Julieta de Micheo, exdiputada Nacional y exdirectora general del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad que abrió el debate a los asistentes.
Claudia Briones, Responsable de Género de la SEGIB manifestó que “En la SEGIB trabajamos para eliminar la discriminación en el empoderamiento económico de las mujeres en América Latina. Todavía hay muchos lugares en los que el derecho del marido es el que prevalece en la administración de bienes”.
Ana Bujaldón, Presidenta de FEDEPE, también intervino desde el público y precisó que “tenemos que plantearnos como sociedad el impacto del retraso de la maternidad y por eso el pasado 8 de marzo hemos solicitado el incremento de los incentivos fiscales para la maternidad”.
Cerró la mesa redonda la Directora General de Fundación Promoción Social, María Beamonte, quien agradeció a todos los participantes sus aportaciones y al Instituto Cervantes de Nueva York su apoyo.