1 abril, 2024
Informe anual de 2023 de Karibu Sana: colaboramos para que 451 niños y niñas en riesgo de vulnerabilidad puedan estudiar en Kenia

El proyecto Karibu Sana ha publicado recientemente su informe anual de 2023, en el que comparte historias y datos muy alentadores acerca de cómo se está logrando facilitar el acceso a la educación a cada vez más niños y niñas que viven en riesgo de vulnerabilidad en Kenia.

Desde la Fundación Promoción Social colaboramos con esta iniciativa que, desde 2016, apoya económicamente a niños y niñas sin recursos que viven en los barrios de chabolas (o ‘slums’) de Nairobi, para que puedan ir al colegio y recibir una educación de calidad que les permita construirse su propio futuro y mejorar las condiciones de vida de sus familias y comunidades.

En este informe anual de 2023, se destaca que los niños y niñas con los que arrancó Karibu Sana en enero de 2016 han comenzado a terminar su etapa escolar. Resulta esperanzador haberles podido acompañar y apoyar a lo largo de toda esta evolución personal y educativa y ver que terminan siendo capaces de labrarse su propio futuro gracias a la oportunidad recibida.

Lo mismo se espera para el total de 451 alumnos y alumnas que actualmente están recibiendo apoyo en el marco de esta iniciativa. De ellos, 351 obtienen la ayuda directamente de Karibu Sana, mientras que los 100 restantes la reciben gracias a los acuerdos de colaboración establecidos con dos colegios locales: Desert Streams y Transform School.

El informe también destaca un hito importante con respecto a estas dos escuelas en 2023, ya que 30 estudiantes del primero y 8 del segundo lograron superar la nota de corte necesaria para comenzar los estudios de Secundaria, es decir, casi la totalidad de los que se presentaron al examen nacional obligatorio. En 2016, ninguna de estas dos escuelas lograba que sus alumnos y alumnas siguieran estudiando, ya que abandonaban la educación a los 14 años.

Para lograr estos resultados, desde Karibu Sana se trabaja con un criterio clave: las familias de los niños y niñas tienen que aportar los uniformes y libros, así como hacerse cargo del tercer trimestre del año (el más breve y barato). Así, el proyecto puede cubrir a más estudiantes y, además, fomenta el sentido de responsabilidad de los padres con sus propios hijos, evitando situaciones de dependencia respecto a ayudas externas. Sin embargo, el proyecto sí cubre en su totalidad de las necesidades de un total de 12 niños y niñas que se encuentran en situación de desamparo por enfermedad, viudedad u orfandad.

Cuando los niños y niñas alcanzan la mayoría de edad y opten por la universidad o la formación profesional para continuar con sus estudios, ellos mismos colaboran con su propia educación (optando a becas, con trabajos compatibles, ayudas familiares o de su comunidad…). Para ayudarles todo lo posible al tiempo que se trabaja su autonomía, desde Karibu Sana se realiza un estudio personalizado para cada estudiante, para ver cuánto puede aportar.

 

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