La mujer marroquí encuentra numerosos obstáculos a la hora de acceder al empleo. Sin duda, la falta de formación adecuada y las dificultades para atender las responsabilidades familiares junto con una actividad profesional son tal vez las más importantes.
Este proyecto trataba de dar oportunidades en el ámbito económico a mujeres con escasos recursos a través de dos líneas de acción prioritarias:
- Mejorar la formación de 500 mujeres procedentes de áreas rurales. Muchas son analfabetas y otras abandonaron la escuela tempranamente, por lo que carecen de formación y de empleo. Para ello se construyó un Centro de Formación en Laâyayda (Rabat) donde se imparten programas de capacitación orientados al empleo y a la generación de recursos a través de la creación de pequeñas empresas artesanales.
- Reforzar la educación preescolar y el acceso a la educación primaria de niños, discapacitados, abandonados y de familias de escasos recursos, en una red de guarderías promovidas por las instituciones del Consorcio. Este plan incidió directamente en el acceso a la educación primaria de unos 800 niños y en la formación de las madres, que podrán seguir los cursos de capacitación para acceder al empleo. Para ello se ha rehabilitado y dotado de nuevos equipos una guardería en Youssoufia, cuyos locales estaban muy deteriorados, se han construido dos salas nuevas y una biblioteca.Las organizaciones que formaron el Consorcio tienen una larga experiencia en el ámbito de la formación profesional y la atención a la infancia. La Association Marocaine pour la Promotion de la Femme Rurale trabaja desde hace más de 10 años en programas de formación de mujeres rurales, y la Ligue Marocaine pour la Protection de l ´Enfance cuenta con más de 90 años de experiencia en el ámbito de la atención a la infancia. Ambas organizaciones trabajan con la FPSC desde el año 2001 y han llevado a cabo varias intervenciones en estos sectores.